Claudia Hurtado es licenciada en Historia, Geografía y Educación de la Pontificia Universidad Católica de Chile, con un Diplomado en Administración Cultural en la misma universidad. Ha dedicado su carrera a rescatar la identidad cultural de los pueblos indígenas a través del fomento de la artesanía tradicional. En sus inicios, durante los años 1999 hasta el 2003, trabajó como colaboradora periodística de Revista Sábado del diario El Mercurio. Allí se desempeñó en la sección de Reportajes “Hecho en Chile” relacionados con temas artesanos y de identidad artística y cultural. Posteriormente, trabajó haciendo gestión cultural y marketing en Larraín & Valdés y en Terra Chile. El año 2009 decidió emprender con su proyecto “Ideartesana”, empresa dedicada a desarrollar proyectos de identidad y excelencia, con el fin de revalorizar la artesanía como sector económico y como parte fundamental del patrimonio cultural. Desde 2018 se desempeña como Directora Ejecutiva en Fundación Artesanías de Chile.

¿Cuál es el valor de la artesanía en los tiempos que corren hoy de crisis y pandemia? 

En estos tiempos de pandemia la artesanía se ha vuelto más significativa y valorada. Las personas nos hemos visto enfrentadas al encierro y esa situación nos ha dado la oportunidad de  tomar conciencia de cómo queremos vivir. En este contexto de reflexión, aparece el valor de lo hecho a mano, de lo natural, de lo sustentable, de aquello hecho con tiempo. En un momento de crisis y convulsión, la artesanía representa un saber hacer saludable e identitario que nos une como chilenos y chilenas.

¿Cómo se puede difundir de la mejor manera y dar a conocer por ejemplo a los cultores de carne y hueso a las nuevas generaciones?

Existen muchas buenas maneras de enaltecer y dar a conocer la artesanía y sus cultores. Creo que es muy importante mostrar con respeto y refinamiento todo lo que existe detrás de una pieza de artesanía y eso se refiere, al artesano o artesana que la hizo, al territorio que él o ella habita y al proceso productivo del oficio que representa. Si se trata que las nuevas generaciones herederas de las tradiciones artesanas sigan con los oficios de sus antepasados, es necesario que ellos vean una posibilidad real de desarrollo y subsistencia económica. La artesanía en Chile aún está viva y eso lo tenemos que saber comunicar para que los chilenos y las nuevas generaciones la valoremos y preservemos. 

¿ De qué manera se valora la artesanía chilena y su identidad? 

La artesanía chilena no ha sido bien valorada, incluso muchas veces ha sido ninguneada. Existen muchos chilenos cultos que la conocen y valoran pero, también, hay una gran mayoría que no la conoce y nuestro objetivo como fundación es llegar con la artesanía a más y más personas porque lo que no se conoce no se valora. ¿Por qué pasa eso? Porque muchas veces nuestros referentes están en el extranjero, pensamos que lo que hace el vecino es mejor a lo que nosotros hacemos. Valorar la artesanía es valorar lo que somos como país, es sentir orgullo por nuestra identidad. 

¿Cómo ves el futuro de la artesanía en Chile?

Soy optimista, creo que vienen tiempos mejores para la artesanía y sus cultores. Si se habla de lujo no como expresión de opulencia sino como aquello que tiene un sentido profundo de excelencia e identidad, creo que la artesanía es el nuevo lujo.